Ricardo, sus proyectos

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Hoy me encontré para almorzar con mi amigo Ricardo
Ricardo siempre toma decisiones radicales sobre su vida
Por ejemplo hoy cuando le dije - Bueno, y qué vamos a almorzar?
Me dijo - Yo ya no almuerzo.


Dijo - He decidido que no puedo seguir gastando una hora de mi vida
en satisfacer una necesidad básica -
Le dije - ¿Entonces qué? Tengo hambre
Ricardo se acomodó los lentes oscuros
La gente salía de sus clases de inglés en el IPCNA
que es el punto equidistante entre nuestras agencias
- Compremos una manzana en Plaza Vea y caminemos - dijo


De modo que fuimos a Plaza Vea
donde él compró 150 gramos de manzana y mandarinas
y yo, que aún pertenezco al grupo de la gente que almuerza
me compré un enrollado árabe de pollo y una pilsen500


nos fuimos caminando
por la ciclovía
hacia el Parque Keneddy


Para cuando llegamos al Mc Donalds
Ricardo (como era de esperarse en un sujeto
que normalmente puede comerse 100 tequeños con guacamole)
todavía tenía hambre
así que dividimos un McPalta con papas y cocacola


Cuando salimos del McDonalds
Ricardo seguía con hambre
así que se compró unas picaras
con lo que pareció culminar su largo ritual
de "ya no me gasto una hora de mi vida en almorzar"


Mientras nos despedíamos le pregunté cómo le iba con las chicas
Me dijo - He decidido no tener novia por el momento
Luego agregó
- Sabes Pierre?
Puede sonar bestia, pero me he dado cuenta
que las chicas son como la televisión por cable
O sea que si tú llegas a tu casa y tienes cable, las posibilidades de divertirte
son de 9 en 10, entonces te quedas viendo TV. En cambio, si no tienes
TV por cable, pues te das cuenta que hay otras cosas a parte de la TV.




Mientras venía de regreso a la agencia por Pardo iba pensando en que
Ricardo siempre anda tomando este tipo de decisiones radicales sobre su vida
pero lo extraño es que a Ricardo nunca le funcionan los planes
y todo es como un sueño loco de mi amigo que termina haciendo
exactamente lo contrario a lo que planeó



me acordé también de un libro de Bryce
y mientras trataba de recordar la frase que aparece en la contracarátula de ese libro
una frase que años antes me aprendí de memoria,
iba pensando en Ricardo y en como podemos
tener amigos tan pastrulos carajo,
tan diferentes a nosotros mismos
y aún así quererlos como hermanos
y llamarlos siempre para escuchar como hablan tantas huevadas juntas

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para ver como hacen con sus vidas
lo que les nace del pellejo










"en el fondo era como si todos estuviésemos presintiendo o hasta descubriendo, que así como el amor es ciego, la amistad, es entender hasta lo que uno no entiende de sus amigos, y perdonarles absolutamente todo, aunque joda"


Alfredo Bryce Echenique





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